lunes, 18 de junio de 2007

Keep It Simple, Stupid!

Recientemente he tenido dos experiencias muy diferentes con juegos, aunque la verdad es que el resultado no es muy sorprendente. Dos de los últimos juegos que he tenido la ocasión de jugar han sido el famoso Puerto Rico y el Conquest of the Empire. Evidentemente el Puerto Rico me ha gustado mucho, y aunque ya habia jugado "online", la experiencia en vivo es infinitamente superior. Por otro lado, del Conquest of the Empire habia leido las reglas y por fin junte a unos amigos para echar una partida.


Lo primero que me ha surgido después de ambas experiencias es que muchas veces se infravalora unas reglas bien escritas. En el caso del Puerto Rico, son bastante claras y los fallos que ha habido (que no han sido pocos :)) han sido debidos a cosas que he pasado por alto al leerlas. Sin embargo, mientras juegas, las reglas se amoldan muy bien al sentido común, hasta el punto de que muchas veces las consultas y ves que lo que tu pensabas que habia que aplicar es lo que aparece en las reglas.


En el caso del CotE, me sucedió un poco lo contrario. Para empezar, son unas reglas que me han resultado difíciles de leer. Hay que leerlas varias veces para poder hacerte una idea del juego en conjunto. Además, la primera experiencia de juego fue bastante negativa, dado que si de por si el juego es largo, el tener que consultar las reglas frecuentemente lo ralentizaba aún más.


Con esto no quiero decir que el CotE sea un mal juego (de hecho tiene una buena posición en la BGG). Tiene unos componentes muy buenos, y seguro que jugando con gente que conozca el juego, es mucho más sencillo de aprender y jugar. Sin embargo, lo he puesto como contraste de lo que es un juego redondo como el Puerto Rico (que por algo es el número 1 de la BGG). Cada regla del Puerto Rico parece pulida hasta el extremo, sin llegar a tener enormes párrafos por cada situación del juego y genera muchas permutaciones. Se explica con mucha facilidad (todo es relativo, evidentemente, no quiero compararlo con un Jungle Speed o similares) y a pesar de que cuando empiezas tienes la sensación de no saber que hacer, en seguida se coje la mecánica del juego y cuando haces algo mal, tu mismo estas viendo lo que has hecho mal. Mi experiencia con el CotE (no deja de ser UNA experiencia) es la de estar perdido durante toda la partida.


Para mi un juego redondo es el que supera la navaja de Okham. Genera una elevada complejidad de juego a partir de unas reglas relativamente reducidas. Otro ejemplo de juego con complejas reglas que no producen tanta complejidad es el Honor del Samurai. La verdad es que no esperaba mucho de ese juego, y de hecho, después de la primera partida, he quedado más convencido, pero a pesar de ello, es un juego en el que las reglas no son claras y producen un juego engorroso que no acaba de estar pulido del todo. Se puede hacer un juego muy complejo cogiendo una oca y inventando una extraña regla única para cada casilla, que se usará si acaso una sola vez en toda la partida. O puedes usar un numero reducido de reglas para crear un juego profundo como puede ser el Go. Ahí esta la brilantez de un juego.

3 comentarios:

Fher N'ando dijo...

El consejo general de burradas estilisticas, y asaltos ala lengua Aspañola dice, ultima linea " Hay...." deberia ser sustituido por ahí, y tal....

La verdad es que en lod emas e s verdad , el puerto rico tiene 4 reglas apra borregos....y el smaurai no convenciopq era lioso..es como el carcassone o el cathan 4 reglas , millones d eposibilidades

Miguel dijo...

Lo que os jodio del samurai es que os ganara un niño de 7 años...

zombi dijo...

ahí las dao